quarta-feira, 5 de novembro de 2008

Ser Portugués: Que extraña forma de Vida...

(para se leer y se escuchar lo fado de Amália Rodrigues con lo mismo nombre)
http://br.youtube.com/watch?v=H7ha2sh0gnY
El excelente texto de Joaquim Maria Cymbron “As três negações de Portugal” (http://legitimismo.blogspot.com/2008/06/as-trs-negaes-de-portugal.html) nos presenta un fenómeno que es en la verdad endémico a la portugalidad y como que un rasgo típico de Portugal y de los Portugueses: la contradicción.
Portugal se contradice diariamente, sin arrepentimiento alguno, en las pequeñas cosas como en las grandes. ¿Porque? Porque el Portugués hace de la fantasía su realidad, una realidad que cree solidamente justificar los más improbables y incongruentes proyectos: es un soñador, un lírico, un mentiroso… que solo miente a el mismo.
En algunos casos el Portugués reconoce el diagnostico: en Portugal es costumbre decirse que “de poeta y de loco todos tenemos un poco”. No hay duda: Portugal es un país de poetas. Fernando Pessoa, uno de los grandes nombres de la poesía portuguesa, define admirablemente el poeta en su Autopsicografía: “O poeta é um fingidor: finge tão completamente, que chega a fingir que é dor, a dor que verdadeiramente sente.”
Ni siempre lo reconoce todavía: si el sueño le llevó, “por mares nunca dantes navegados” a crear un imperio con presencia en todos los continentes del globo, nacido de un país de uno millón de habitantes al tiempo – hecho que sería imposible si no fuera real - la fantasía también le hizo desplegarse del suelo, volar fuera de la Verdad, la Luz y lo Camino que es Jesucristo y precipitarse como Ícaro en una auto destrucción a tres tiempos descrita por Cymbron. Eso lado oscuro de su bipolaridad colectiva no lo reconoce Portugal.
Más rápido se apaña un mentiroso que un cojo. Las constantes contradicciones están a la vista de todos, por mucho que no las quieran ver. Algunos ejemplos estructurales:
La Nacionalidad: El nacionalismo portugués siempre se ha afirmado contra España, más concretamente contra Castilla. Pero una afirmación por una negación es en si mismo una contradicción. Es en la verdad una relación que tiene tanto de amor como de odio. ¿Si así no fuera, como se explicaría en las armas de Portugal las Quinas estuviesen abrazadas por las armas de Castilla? ¡Si! No son los supuestos siete castillos moros conquistados en Algarve!
En las primeras banderas portuguesas en que eso elemento aparece, los castillos tienen número variable e siempre más que siete. Eso elemento fue en la verdad introducido por El-Rei D. Afonso III en memoria de su madre… que nació en Castilla. ¿León, Aragón, Navarra, Granada, alguno de esos reinos que forman la moderna España tienen las armas de Castilla en las suyas? Otra cuestión curiosa es que lo Día de la Nación (antiguo Día de la Raza) lo 10 de Junio conmemora la supuesta muerte y no el nacimiento de Portugal (solo conozco un caso semejante, lo de la Serbia). En la dicha fecha de lo año de 1580 quedaba muerto Luís Vaz de Camões, segundo la leyenda, con la muerte de Portugal como país independiente, por los sesenta años de unificación peninsular construida por D. Felipe II.
Las armas del supuesto enemigo en las nuestras... día de victoria que conmemora una derrota… a mi me parece antes un caso pasional… ¡y que aún va acabar en casamiento!
El Estado y la Política: Portugal es, hace casi 100 años una república. Pero una república que mantuvo en su bandera las armas que fueron Avis y Bragança, las armas del Portugal monárquico. Hace tiempos me decía un italiano: “Hombre, nosotros expulsamos los Saboya para siempre… no entiendo que república laica es la vuestra que recibe la familia de los antiguos monarcas y que festeja sus bodas y sus bautizados como se de una ceremonia de estado se tratara.” “Más”, le dijo yo con amargura, “D. Duarte acompaña y ayuda lo gobierno republicano en todo lo que le piden”. Otro caso extraño es que, desde hace muchos años, pero con mayoría de razón desde que hay elecciones “libres”, que es casi imposible que un jefe de estado, un presidente de la republica no sea reelegido y cumpla lo máximo tiempo de ejercicio que la ley portuguesa permite, que es de diez años. Más tiempo pudiera mantenerse en lo poder, más tiempo los portugueses le darían para tal. Los portugueses son monárquicos viscerales, mismo que no lo sepan. No hay elecciones presidenciales que tengan más que 30 a 40% de participación de votantes.
Portugal quise la republica pero los portugueses no la quieren.
La Religión: En cualquier encuesta que se haga los Portugueses se dicen cristianos católicos. Y se puede decir que las iglesias se veen llenas al domingo y no es mentira. O mismo que se construyó una nueva catedral en Fátima para 10.000 personas o que el dicho santuario recibe todos los 13 de Mayo 500.000 peregrinos o más. Todavía, los portugueses escogen para gobernarlos, una vez después de la otra, los más acerados masones, los peores enemigos de la Iglesia. O más grave, deciden en referéndum que se debe despenalizar lo aborto, así como confirmarán todas los crímenes contra Cristo que pasen de la cabeza de lo Presidente del Gobierno Español para la del Primero Ministro Portugués. Aún más fantástico, en un país en que la porcentaje de votantes que manifiesta su apoyo a ideologías de extrema izquierda revolucionaria llega a casi un quinto del total, se descubre que la grande parte de los votantes del partido comunista es al final… cristiana católica, como lo es mucha de la población del Alentejo, la tradicional base de apoyo del partido.
¿Los portugueses tienen una cristiandad suicida? ¿O defienden lo comunismo mesiánico? ¿Será que saben exactamente en qué acreditan?
La Sociedad: habiendo vivido las tres revoluciones sociales de habla Cymbron y una supuesta sociedad sin clases, lo que pasa es que mismo con un presiente gobierno supuestamente socialista las diferencias de rendimientos entre los portugueses jamás han sido, en toda su historia, tan acentuadas. Las diferencias sociales, por desaparecimiento de la clase media son hoy mayores que nunca. Continúan todavía los portugueses a ser extremamente reverénciales y formales: se tratan los simples graduados de las universidades por “Senhor Doutor”, lo tratamiento de “Excelencia”, sobretodo por escrito, es extremamente común y utilización de la tercera persona casi indispensable en sociedad. Los portugueses aunque probadamente circunspectos y melancólicos, con sus fados y baladas tristes, son personas que reciben los visitantes con una pungente amabilidad, con una contagiante y sencilla sonrisa. Mismo que les tenga nacido un hijo en eso día, si les preguntan como están, contestan: “Vamos andando…” o “como Deus quer…”.
¿Y nosotros, los Portugueses, sabemos lo quiere Díos? ¿Sabemos lo que queremos?¿En qué nos quedamos? ¿Queremos lo que no queremos? ¿Somos lo que no somos? ¿Cambiamos pero ni tanto así?
"Nem rei nem lei, nem paz nem guerra,
Define com perfil e ser
Este fulgor baço da terra
Que é Portugal a entristecer —
Brilho sem luz e sem arder,
Como o que o fogo-fátuo encerra.
Ninguém sabe que coisa quer.
Ninguém conhece que alma tem,
Nem o que é mal nem o que é bem.
(Que ânsia distante perto chora?)
Tudo é incerto e derradeiro.
Tudo é disperso, nada é inteiro.
Ó Portugal, hoje és nevoeiro...
É a Hora! "
- Fernando Pessoa, in Mensagem -

segunda-feira, 3 de novembro de 2008

El PORTUGUÉS ES MARINO - Fray Trabucaire



Un colono de las Malvinas,
Portugués de nombre Jacinto,
Panadero, pastor....¡ Marino !
Allá en Portugal, las quinas....

Allá en Portugal, todos son marinos;
Eso el buen Jacinto decía,
Con razón y gallardía,
Es la Historia, el destino;

El luso busca la libertad,
Llama a la aventura,
El comercio lo asegura,
La Orden de Cristo para la mar....

El portugués de Pessoa,
Era de barcos, muelles y puertos,
El portugués de Camões aún no ha muerto,
Tendrá que resurgir en buena hora,

Buscad entre portugueses,
Y muy pronto hallaréis marinos,
La Casa de Avís guió el camino,
Senderos de cristianos potentes,

Buscad en un ruso,
Y hallaréis un campesino,
Pensad en el marino,
Hallaréis al luso,

Del santuario y la ermita,
A los mares y los continentes,
Las capitanías sembraron conscientes,
Pátria Nova recogió la misiva....

Portugal melancólico, olivarero,
Al dulce café arribaste,
Portugal, Portugal de saudade,
Fado cantas con quejido marinero.
---
Do meu AMIGO e poeta Fray Trabucaire in http://lasantaalianza.blogspot.com/2007/10/el-portugus-es-marino.html. Estarás sempre por cá, pá!

Para Ordóñez

Da terra quente, Do mar bramante, Salta à vista, desarmante, A bravia mas apaixonante Mulher que é Espanha, a Valente! Olhos de fogo, jade luzente Que cegam o ímpio e guiam o crente! Mais lindos não vi. E sou errante! Luso do Mundo! E teu amante… Escondido no Poente. Orgulhosa e desafiante, De altivo semblante Não se dá a toda a gente! É casta mas insinuante, E faz do Luso um padecente… Por seu amor, inconstante! Às vezes gelado, outras fervente! Dominador e ameaçante! É paixão forte e desconcertante De ternura e fúria dissolvente! Mas não se pode negar o que sente O coração! Não se lhe mente! Um dia casarão! Mesmo distante,
Casarão! O Luso e a sua Amante… …E Deus ficará contente!

Contra a Lenda Negra: Filipe II de Espanha - Um Agente de Concórdia Peninsular

Por muito que atraia o mal querer de alguns dos meus compatriotas menos informados, menciono o caso de um Rei pouco compreendido e erradamente julgado pela história: Filipe II de Espanha – Filipe I de Portugal. Será escusado apresentar aqui uma nota biográfica genérica de Filipe II… ater-me-ei à sua relação com Portugal, menos conhecida, e à desmistificação de algumas afirmações correntes e tidas por verdades históricas em Portugal que, provadas falsas, me levam a eleger Filipe II como um agente da Concórdia Peninsular. RELAÇÃO COM PORTUGAL (Da Wikipedia a Enclopedia Livre)“Educado por cortesãos portugueses nos primeiros anos de vida, Filipe teve o português como primeira língua até a morte da mãe e cortava a barba à moda portuguesa. Filipe, em 9 de dezembro de 1580, atravessou a fronteira, entrou em Elvas, onde se demorou dois meses recebendo os cumprimentos dos novos súditos. Dos primeiros que o veio saudar foi o duque de Bragança. A 23 de fevereiro de 1581 Filipe II saiu de Elvas, atravessou triunfante e demoradamente o país, e a 16 de março de 1581 entrou em Tomar, para onde convocara cortes. Distribuiu recompensas, ordenou suplícios e confiscos, e recebeu a noticia de que todas as colónias haviam reconhecido a sua soberania, exceptuando a Ilha Terceira, onde se arvorara a bandeira do prior do Crato, ali jurado rei de Portugal a 16 de abril de 1581. Nas cortes, prometeu respeitar os foros e as isenções e nunca dar para governador ao país senão um português ou um membro da família real. Expediu de Lisboa tropas que subjugaram a ilha Terceira, em que D. António fora auxiliado pela França, e partiu para Espanha depois da vitória naval de Vila Franca, em que o Marquês de Santa Cruz destroçou a esquadra francesa em 26 de Julho de 1582, obtendo a submissão da ilha.” Há uma correcção a fazer ao texto da Wikipedia, pois também Macau (além da Ilha Terceira) não hasteou a bandeira Habsburgo. Todavia saltam à vista várias contradições com afirmações correntes pela sociedade, escolas e círculos culturais portugueses. Vejamos: 1 – “D. Filipe II usurpou o trono português.” Falso. Em 1580 havia uma crise dinástica em Portugal. O Cardeal-Rei D. Henrique morrera sem herdeiros (como seria de esperar) e a pretensão de D. Filipe II ao trono português era tão ou até mais válida que outras: D. Filipe II era sobrinho, pelo lado materno, do Cardeal-Rei. Citarei o excelente estudo de Pedro Cardim “Política e Identidades Corporativas no Portugal de Filipe I”, como outras vezes para diante. Diz o autor: “(…)Na verdade e como demonstrou recentemente Mafalda Soares da Cunha, a inexistência de normas de sucessão dificultou bastante a avaliação dos fundamentos legais invocados pelos diversos candidatos. Coexistiam vários regimes sucessórios e havia, para além disso, a possibilidade da Assembleia de Cortes intervir, declarando o trono vago e apresentando-se como a entidade competente para decidir quem tinha direito a ocupá-lo.(...)”. Não havia pois, nenhuma pretensão ao trono mais válida que a D. Filipe II: a defesa que fez, pelas armas, dos seus direitos ao trono português, foi a que faria qualquer outro candidato, nascido ou não em Portugal, em semelhante cenário. 2 – “D. Filipe II conquistou Portugal para a Coroa de Espanha”.Falso. Foi o próprio Rei D. Filipe II que se recusou a tratar Portugal como reino conquistado, apesar da divisão das opiniões contemporâneas. Cito novamente o estudo de Pedro Cardim: “(…)O enviado veneziano a Madrid, Matteo Zane escrevia que « Portogallo è regno conquistato et come tale si deve trattare à differentia dell altri che si sono dati volontariamente et à perció si devi guardari li privileggi et li patti accordatti id che non è necessário com questi…». De facto, da parte de alguns portugueses houve alguma resistência armada contra as forças chefiadas pelo Duque de Alba e D. Filipe teve a oportunidade de declarar que Portugal era uma conquista, quer dizer, poderia ter tirado partido dessa situação e alterado os foros do reino, adaptando-os às suas conveniências. Contudo e contra tudo o que seria de prever, D. Filipe decidiu noutro sentido, acedendo a dialogar com os «três estados do reino», numa reunião das Cortes de Portugal.(…)”. 3 – “D. Filipe II não tinha a estima do povo português quando se tornou rei.” Falso. Voltaria ao texto informativo da Wikipedia: “Filipe, em 9 de dezembro de 1580, atravessou a fronteira, entrou em Elvas, onde se demorou dois meses recebendo os cumprimentos dos novos súbditos. Dos primeiros que o veio saudar foi o duque de Bragança. A 23 de fevereiro de 1581 Filipe II saiu de Elvas, atravessou triunfante e demoradamente o país, e a 16 de março de 1581 entrou em Tomar, para onde convocara cortes”. Quatro meses para atravessar 160 km. Quatro meses de banhos de multidão, de sessões de beija-mão e vassalagem (nem sempre desinteressada mas não mais do que noutras ocasiões). Tomaram os políticos mais populistas de hoje em dia granjear tanta estima. 4 – “D. Filipe II desprezava Portugal.”Falso. Começaria por fazer a este título citação de um texto que pode ser encontrado no sítio http://www.agencia.ecclesia.pt/: “(…)Quando, mercê das vicissitudes históricas que se sucederam à morte de D. Sebastião, e ao facto de o Cardeal D. Henrique na regência do Reino, não deixar sucessores dinásticos em Portugal, ter sido o rei Filipe II de Espanha, (que foi Filipe I de Portugal) – conforme foi jurado nas Cortes de Tomar em 1581 – logo o soberano chamou a si promover uma compilação de Leis – Ordenações – a partir das quais, entre outras decisões, optou por alvarás de criação de novas Misericórdias, não só em Portugal, mas também em terras de longe, como nas Filipinas e paragens várias do Pacífico. É que, conhecimento que teve da Misericórdia de Lisboa e da de Almada, logo optou por visitá-las e onde foi recebido com todos os protocolos institucionais, sendo feito Irmão honorário em ambas.Recebido com honras de rei, já não as aceitou na despedida, recusando-se ao beija-mão, com esta observação significativa: “Vim como rei, parto como irmão; e é como irmão que vos abraço”. Não poderia ser de outra forma. Não se despreza a terra natal da nossa mãe e da pátria da nossa primeira língua. Mas há mais testemunhos, que posso citar do já referido estudo de Pedro Cardim: “(…) À medida que iam sendo divulgadas as notícias que davam conta da postura conciliadora de D.Filipe, houve quem considerasse que o rei católico foi demasiado brando com os seus novos súbditos portugueses. Um dos que manifestou essa opinião foi ao atrás citado Zuan Franceso Morosini. A 26 de Dezembro de 1580 escrevia esse diplomata veneziano, com algum desagrado que «[D. Filipe] procura in tutte le sue attione di conformarsi pio que puo com li costumi, che usano li Re di Portogallo com quei populi…»(…)”. Passou, de resto, dois anos inteiros em Portugal, logo após a concretização da Monarquia Hispânica. 4 – “D. Filipe II foi um rei tirânico e sanguinário.”Mais uma vez falso. Não foi sanguinário em Portugal mais do que outros reis portugueses nascidos nativos. Repare-se que mandou abafar militarmente a revolta da Ilha Terceira, nos Açores, apenas depois de quase um ano e meio de insubmissão da ilha, ano e meio de constante e provada negociação após o qual atacou mais pelo chegada de uma esquadra francesa à ilha para se aproveitar do movimento de insurreição (a cobiça de Catarina de Médicis cobiçava ainda um trono a que tinha uma pretensão muito pouco fundamentada, em termos de parentesco), que por qualquer outra razão. Cuidado “diplomático” bem pouco comum à época. Outras houve, mais pequenas, e as mortes infligidas para as sufocar, sempre de lamentar, não sobressaem pela crueldade, de muitas outras da época, muito pelo contrário. “Nas cortes, prometeu respeitar os foros e as isenções e nunca dar para governador ao país senão um português ou um membro da família real.” Com esta posição e segundo Pedro Cardim: “(…)as condições estabelecidas na «Patente» representavam como que um contrato entre o monarca e o seu novo reino, no qual se definia a modalidade da integração de Portugal na Monarquia Hispânica. Esse contrato era regulado, sobretudo por imperativos morais, ou seja, estabelecia um a obrigação de obediência que pesava quer na consciência dos vassalos, quer na do rei. Enquanto o monarca respeitasse esses compromissos, os vassalos tinham a obrigação de manter a obediência ao seu senhor; porém se o rei não cumprisse aquilo que havia prometido, os vassalos poderiam deixar de estar obrigados a essa obediência.(…)” . Conclusão: D. Filipe II de Espanha / Filipe I de Portugal foi um Grande Hispano e um Agente da Concórdia Peninsular: Uniu sem usurpar, negociou quando podia impôr, fez-se estimar por quem o podia odiar, aprendeu a amar um reino que não conhecia e reinou sábia e justamente - para os padrões da sua época. Cumpriu a sua promessa para com o povo português e teve dele, lealdade e vassalagem até sua morte. D.Filipe III e D. Filipe IV não honraram a sua palavra e com isso destruíram, por muito tempo, a concórdia que esse grande rei construíra.

Carta a Minha Filha - Da Europa à Anti-Europa de Rafael Castela Santos

- Um dos mais belos textos do Tradicionalismo Português. Não me canso de lê-lo. por Rafael Castela Santos in http://www.alamedadigital.com.pt/ Querida filha,Escrevo-ta porque és verdadeiramente europeia. Porque foste concebida em Portugal, em Fátima, porque nas tuas veias corre sangue espanhol, francês e alemão. Porque cresceste no Reino Unido. Porque falas vários idiomas e, além disso, já sabes alguma coisa de latim. Porque em ti vê o teu pai, que te ama profundamente, reflectida uma certa ideia carolíngia que me enche de saudade. E porque, acima de tudo, és católica, que é a verdadeira Fé: "Unique et Vraie", como te faço repetir frequentemente, petite chouanne. Porque a única maneira de se ser verdadeiramente europeu é ser-se católico. Os que o não são e os que combatem a nossa Santa Religião são destruidores da Europa, saibam-no ou não. Há uns dois mil anos, um povo nobre, os romanos, conquistavam a Europa. Eram excelentes em engenharia civil e na arte militar. Lembra-te das pontes e dos aquedutos que vimos em Espanha e nas calçadas e ruínas romanas que visitámos em Cirencester, em Metz, em Salamanca, em Mérida ou em Évora. E, minha filha, ainda nos deixaram leis, o Direito Romano, um monumento impressionante que nos continua a inspirar actualmente. Um dia vou explicar-to, mas isto tem a ver com o que o papá te disse sobre ser justo, tal como te digo que temos de ser justos com os nossos vizinhos ou que tens de ser justa com as outras meninas da escola. Sabes que o papá sempre te diz que o romano ficou mais e melhor identificado na pele dos touros de Espanha e de Portugal do que nos do resto do Império. Somos mais romanos que os outros romanos, se assim se pode dizer. Vês este amor reverencial que tenho pelos teus avós que são os meus pais? Vês que a primeira coisa que faço quando te levo à minha Lusitânia interior é ir ao cemitério? Isto, minha querida, são coisas da nossa Santa Religião, mas também são coisas dos romanos. Quando eu for velhinho quero que tenhas por mim o mesma respeito que tenho pelos teus avós e, quando morrer, quero que rezes por mim tal como eu faço por todos os nossos mortos. Não te peço isto só por mim mas também por ti, para que saibas onde estão as tuas raízes. E porque ao honrares os teus pais e antepassados honras a tua Pátria, meu tesouro. Sempre te digo, minha filha, que penses nas coisas, que raciocines. Porque de todas as faculdades da tua alma a razão é a mais importante. Mas isso, minha filha, foi-nos ensinado pelos gregos. E os romanos, quando se expandiram e invadiram outras terras, deram-se conta, porque não eram tontos, de que os gregos eram muito espertos e capazes. Assim se ligam romanos e gregos. Lembras-te do homem que soube morrer serenamente e que se chamava Sócrates? E daquele outro que era o mais privilegiado da Antiguidade, Aristóteles, de quem já te falei? Esses eram gregos. Um destes dias, minha filha - se Deus quiser - vamos lê-los juntos e falaremos deles. Mas faltava vida a tudo isto. Existiam demasiadas mortes, demasiada crueldade. Havia escravidão. Mas, sobretudo, havia escuridão. E havia tudo isto porque os nossos primeiros pais, Adão e Eva, pecaram. Tornava-se necessário restaurar a raça humana. Porque só um Deus podia apagar a ofensa que nós, os humanos, Lhe tínhamos feito. Entre um povo eleito por Deus, os judeus, cujo sangue também te corre nas veias, nasceu o Messias, o Redentor: Nosso Senhor Jesus Cristo. Mas Israel, chamado a ser a luz do mundo, rechaçou o Filho mais Sublime da raça escolhida e a sua mensagem chegou a Roma, aos gentios. Sobre esta obrigação assumida de amar a Deus sobre todas as coisas os homens construíram durante centenas de anos a maior civilização jamais conhecida: a civilização cristã. Repara, minha filha, que nessas Catedrais e nesses castelos que temos visto juntos, sempre Jesus Cristo, verdadeiro Deus e verdadeiro homem, é a figura central. Nota quantas coisas belas e preciosas se fizeram. Esse Santo a quem rezamos, São Tomás de Aquino, escreveu uma obra única. Um poeta genial, Dante, escreveu a Divina Comédia. Recordo-me, minha filha, de como um dos melhores momentos da minha vida era quando me sentava ao lado do teu berço vendo-te dormir e relia a Divina Comédia. A Virgem, meu amor, estendia o seu manto azul e protector sobre aquela civilização. Mas veio a decadência e a Europa, a Cristandade, deixou de ser Cristandade. Começou a Anti-Europa, a Anti-Cristandade. Tal como na época de Moisés, quando desceu do Sinai e encontrou o povo eleito adorando um bezerro de ouro, começou a prosperar a ideia de que o dinheiro e o comércio eram o mais importante. Já não existiam cavalheiros a protegerem donzelas nos castelos, tal como nos contos que te leio, e os reis e os poderosos exploravam os pobres e os desvalidos em vez de os defenderem como seria seu dever. As pessoas começaram a pensar coisas estranhas, minha filha. As palavras ficaram vazias de significado e entregaram-se os homens a coisas feias. Até aí o centro de tudo era Deus, Jesus Cristo. Começaram a pôr o homem no centro das coisas e a Deus já não lhe davam importância. Vieram homens maus, como Lutero, que dividiram a Europa em duas. Dás-te conta, minha querida, de que na nossa querida Alsácia os povos luteranos, embora sejam mais limpos pelo lado de fora, são mais feios do que os católicos? A seguir vieram coisas terríveis, como o que sucedeu nessa tua outra pátria, a França, onde uns revolucionários miseráveis construíram um mundo que odiava a Deus e à Santa Igreja Católica. A Anti-Europa, a Anti-Cristandade, mostrava a sua verdadeira face. Compreendes agora, minha filha, porque me aborreço e até grito cada vez que passeamos em França e vemos estátuas erigidas a pessoas como Eckermann, Kléber ou Napoleão, todos eles assassinos da pior espécie? Mas, olha, em todos esses países houve resistência. Resistimos em La Vendée, em França, tal como quero que tu resistas, petite chouanne. Resistimos em Espanha, com os heróis carlistas, até à última Cruzada em 1936. Também nas outras Espanhas, que também são Europa, sofremos muito, como por exemplo os federais argentinos, que fizeram frente aos selvagens e imundos unitários, ou, mais tarde, os mártires carlistas em terras da Virgem de Guadalupe. Também lhes fizemos frente em Portugal, a esses republicanos, maçons e liberais. Em Itália fizemos o que pudemos contra os garibaldinos e carbonários, autênticas orcas saídas do Inferno… Entretanto, na Rússia começava a germinar algo que acabaria por ser como Saurón. Tiraram o poder à Europa e pouco a pouco deram-no à Ásia, à China e à Rússia. O comunismo, a penúltima heresia mas até hoje a mais maléfica, triunfou nestes países. Se seguirmos a Mensagem de Fátima, um dia a Rússia voltará para a Fé e para a Igreja. Nesse dia a Europa ressuscitará. Isso a que agora chamam Europa, a União Europeia, não são mais do que passos em direcção a esse homem de perdição, o Anticristo. Não creias neles, meu tesouro. O papá não está bem de saúde, filha minha. Talvez eu já não veja. Mas transmiti-to o melhor que pude e soube. A Europa é a Cristandade, não é outra coisa. O que não for a Cristandade não é Europa, é a Anti-Europa. Pratica a virtude. Luta por isso, minha filha, ainda que para tal percas a vida. Transmite-o aos teus filhos, aos meus netos, e se fores freira - o que me alegraria - di-lo aos filhos espirituais que venhas a ter, porque te chamarão de Madre. E combate o fariseísmo, que é o cancro que corrói o espírito.Tem esperança, minha querida. Passamos tempos maus, mas a vitória pertence a Cristo e a mais ninguém. A Europa voltará a ser Europa. Regressará a Cristandade e ecoará um grito de felicidade como jamais a conhecemos em muitos séculos e haverá paz em Cristo. Isto já te ensinei a dizer em latim: Pax Christi.Ah! Já me esquecia de uma outra coisa: Não comas tanto chocolate!O teu pai que te quer muito, com toda a sua alma e todo o seu ser, que te abençoa em Nome do Pai, do Filho e do Espírito Santo. In http://www.alamedadigital.com.pt/

União Cristã Hispana: a vida para além da morte da União Europeia

A União Europeia está sentenciada. Não viverá muito.
Os últimos conflitos do continente (Bósnia-Herzegovina, Kosovo e Geórgia) e ultramarinos (Iraque, Tibete, Darfur entre tantos) vieram provar que, como entidade política, a União Europeia só existe em tempo de paz. Não fala a uma voz, não assume uma posição consensual, não consegue mobilizar-se, como um todo, para nenhuma causa desafiante. Não é ouvida na mesa da decisão geo-estratégica. Continua a ser e desde 1945, o criado que serve aos Estados Unidos da América e à Federação Russa os pratos da sua Guerra Fria.
Em tempo de paz, a ganância capitalista na procura de mercados que a levou a projectar o seu alargamento sem limites e sem critério, tornou-lhe a manta curta: para tapar a cabeça, destapa agora os pés. Subornou as cabeças governantes a entregarem mais uma vez (desta vez em Lisboa) os seus países em sacrifício ao holocausto da Globalização, mas os pés, alguns povos europeus, como o Irlandês e o Polaco, recusaram-se a fazer esse caminho. Quis vencer sem convencer... e perdeu.Perdeu e perderá muito mais. Porque para unir nações é preciso mais que dar-lhes uma moeda comum e prometer-lhes que terão amanhã muitas dessas.
De tudo na vida, bom e mau, deve ficar mais do que nada... da construção europeia fica de bom algumas barreiras económicas e políticas que destruiu e, de mau, as muitas outras que deixou de pé, porque não teve força para as destruir. E não teve força porque lhe falta:
- Uma Identidade Patriótica: aquilo que une as nações tem de ser mais que a simples busca de prosperidade. Uniões políticas que não sejam também afectivas são casamentos de conveniência: vazios e propensos a traições. Sem um sentimento de pertença mútuo, de respeito e tolerância pela diferença não se faz uma união bem sucedida... entre pessoas e entre nações;
- Uma Identidade Cultural e Histórica: língua, cultura, herança histórica são factores de comunhão entre as nações sem os quais, por muito que não haja fronteiras físicas, nunca se concretizará uma livre e efectiva circulação de pessoas, bens e ideias que possa impulsionar todos os campos do desenvolvimento humano e crescimento civilizacional das nações que se pretendem unidas;
- Uma Identidade Religiosa: por último o mais importante! Uma união de nações sem Fé, ou melhor, sem Fé Cristã, não aplica no seu quotidiano e na relação com outros blocos políticos e geo-estratégicos os bons princípios de humanidade, espiritualidade e elevação universal que A fundamentam, e que podem tornar essa união muito maior do que as suas fonteiras!... por esta falta de identidade comum fracassou a União Europeia...
...por esta identidade comum poderá ter sucesso uma União Cristã Hispana, que não seja um império mas um farol de Cristandade rasgando a treva dissolvente da globalização! Basta querer... e fazer o próximo querer! Amar a Espanha como se ama a Portugal é ser-se mais Português!!!
VIVA A HISPÂNIA!!! VIVA O MUNDO HISPÂNICO!